Será una filial de Airbus, la empresa Tarmac, la que se encargará de explotar este complejo industrial dedicado al mantenimiento, reparación y reciclaje de aviones, cuya construcción ha liderado en los últimos años el Gobierno aragonés aprovechando los terrenos del histórico aeródromo de Caudé, que el Ayuntamiento turolense compró en su día por 600.000 euros.
Alejandro Ibrahim, director del Aeropuerto turolense, ha indicado que Tarmac quiere empezar su actividad industrial en este complejo cuanto antes, porque el otro centro que gestionan en la localidad francesa de Tarbes «lo tienen totalmente colapsado».
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